Las encuestas que en 2016 predijeron la victoria de Trump muestran que recupera terreno ante Biden
Pocas, muy pocas encuestas publicadas antes de las últimas elecciones, las de 2016, en Estados Unidos señalaban a Donald Trump como favorito. Los tiros se demostraron claramente errados cuando el magnate acabaría derrotando a Hillary Clinton para proclamarse presidente del país. En la presente campaña podría repetirse la historia, puesto que la mayoría de las encuestas y proyecciones vuelven a señalar a su rival como favorito de cara a la cita electoral del próximo 3 de noviembre.
Sin embargo, dos encuestas que sí acertaron con la victoria de Trump hace ahora cuatro años apuntan a cierta recuperación en su horizonte: eso sí, aún dándole al demócrata Joe Biden el liderato. Se trata de las encuestas realizadas por IBD y TIPP, que señalan que el apoyo a Joe Biden caería hasta un 48,1%, mientras que las cifras de apoyo a Trump presentarían un ascenso hasta el 45,8%.
A dos semanas ya de las elecciones en EEUU, la mayoría de las encuestas, empero, siguen otorgándole a Joe Biden el cartel de favorito. Lo muestra el gráfico que acompaña a esta información, procedente de una recopilación de las principales encuestas, sondeos y proyecciones agregada por el reputado sitio FiveThirtyEight.
Incluso las encuestas más favorables a Donald Trump en las últimas semanas, según explica Fox News, muestran que el actual presidente está encontrando dificultades para asegurar el voto en lugares que en 2016 ya se mostraban favorables a él. «Los ciudadanos de edad avanzada son otro grupo clave de votantes que en 2016 apoyaron a Trump y ahora se están mostrando favorables a Biden», ha llegado a asegurar el encargado de IBD, una de las mencionadas encuestas que sí le conceden cierto margen de remontada al republicano.
Comienza el voto anticipado en Florida
El voto anticipado ha comenzado ya lunes en Florida, el más poblado de los estados clave de la elección estadounidense y donde Donald Trump y Joe Biden marchan bastante igualados en los sondeos en este estado, lo que genera escalofríos en caso de que la elección sea muy pareja.
El presidente republicano visitó Arizona, otro estado muy codiciado, en el marco de la maratónica serie de actos que inició una semana después de asegurar que se «curó» del covid-19. En este territorio donde venció en 2016 -pero en el que los sondeos le sitúan ahora por detrás del demócrata Biden-, Trump se comprometió a rescatar a la golpeada economía por el coronavirus y criticó a su contrincante por pretender «que los socialistas campen en nuestro país».
«Sois afortunados de que sea vuestro presidente», ha asegurado el magnate conservador a sus seguidores, la mayoría sin mascarillas y sin guardar distancia social en un mitin al aire libre en Prescott, al norte de Phoenix.
El exvicepresidente demócrata, de su lado, no tenía ninguna cita en su agenda y, según la prensa, dedicó la jornada a prepararse para el debate final del jueves. Quien sí viajó a Florida fue su compañera de fórmula, Kamala Harris, de vuelta a la carretera tras cuatro días de pausa por casos de covid en su entorno.